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Acerca de Famagusta

Pocas ciudades resultan ser tan atractivas en Chipre como Famagusta. Hoy en día, la ciudad representa la realidad chipriota como pocas otras ciudades con un pasado particular y intricadamente vinculadas a la historia. Su puerto era famoso en la antigüedad y una razón eterna para disputas. Y estas luchas interminables le valieron el amor y el odio de muchos. ¿Quién hubiera imaginado que este amor y este odio continuarían estando presentes en Famagusta y en el siglo XXI?

En la actualidad, Famagusta es una ciudad próspera de 50 mil habitantes, donde sus ciudadanos realizan sus actividades diariamente y se desarrollan con una huella muy particular. Su arquitectura ecléctica es un gran sello distintivo, donde los edificios antiguos se mezclan con edificios modernos, todos custodiados por un muro que permanece ileso con el tiempo.

La ciudad aún conserva rasgos de un pasado no muy lejano, algo que los turistas buscan descubrir como si fueran joyas ocultas. Las fortificaciones de Famagusta son una serie de murallas defensivas y otras fortificaciones que rodean la ciudad. Estas gruesas paredes fueron construidas en el siglo XIV, durante el reinado lusignano de Chipre. Y hasta el día de hoy, permanecen firmes sin acusar recibo del paso del tiempo. Es bueno decir que fueron rediseñados en los siglos siguientes antes del fuerte ataque del Imperio Otomano en 1571. Las fortificaciones duraron casi un año hasta que finalmente tuvieron que capitular ante los otomanos.

Hoy en día, Famagusta es una de las ciudades más prósperas del este de la isla. Sus actividades económicas son un motor imparable, y entre ellas destaca el turismo. Su puerto histórico sigue siendo una de las principales fuentes de ingresos de la ciudad, como lo era hace mil años.